Un conscripto de 18 años desapareció el lunes por la mañana del Regimiento Padilla, en circunstancias aún poco claras. Su familia llegó desde Tarija tras ser notificada por personal militar. Existen versiones contradictorias sobre su paradero y las circunstancias de su salida del cuartel.
Crece la incertidumbre en torno a la desaparición de un joven conscripto del Regimiento Padilla en el barrio San Gerónimo, quien no aparece desde las 10 de la mañana del lunes. Se trata de un soldado de 18 años identificado como Lucas, quien cumplía su servicio militar obligatorio y debía licenciarse en el mes de junio.
Sus familiares, entre ellos su hermana María y su madre Marina Choque, llegaron hasta el recinto militar para pedir explicaciones. Según el relato de la hermana, el domingo acudieron a dejarle Bs 70 en efectivo que él mismo había solicitado días antes.
“Nosotros fuimos a dejarle 70 bolivianos el domingo, nos dijo que no salía de franco y por eso volvimos a buscarlo… ahí fue cuando nos avisaron que había desaparecido”, declaró con evidente preocupación.
Las versiones ofrecidas por algunos suboficiales resultan confusas. A la familia se le dijo inicialmente que el joven se había ausentado durante la noche con destino al colegio, pero luego una suboficial mencionó que se habría fugado “de manera indebida”. A pesar de esta supuesta fuga, el dinero entregado por su familia no fue retirado, lo que genera más dudas sobre su paradero.
“Nos dijeron que se escapó para ver a su novia, pero él no tiene novia… nosotros hablamos con el coronel y con un suboficial de apellido Anze”, relató su hermana, quien no encuentra lógica en lo informado por las autoridades militares. Otro dato inquietante revelado por los propios uniformados es que «hay una parte de abajo por donde se puede salir», lo cual levanta sospechas sobre posibles negligencias en la seguridad del recinto.
La madre del soldado también expresó su indignación: “Mi hijo estaba feliz, no tenía motivos para irse. Hace una semana me dijo que ya faltaba poco para licenciarse y que estaba bien. Nunca se quejaba de nada”, afirmó Choque. El joven también asistía al colegio nocturno Belgrano, por lo que algunos oficiales sugieren que habría salido con ese pretexto.
Hasta el momento, la unidad militar no emitió un informe oficial detallado y la familia exige una investigación seria.
