Carla Argami Pocota, de 24 años, fue brutalmente embestida por un vehículo cuando regresaba de una serenata en la avenida colindante al parque temático. Hoy, lucha por su vida y su memoria entre las paredes del hospital, mientras su agresor, identificado como Elder Chavarría, permanece desaparecido. La familia, en situación económica crítica, ruega por apoyo ante la indiferencia del responsable.
Cristina Flores, abuela y única tutora de la víctima, relató entre lágrimas cómo se enteraron del hecho. “Nos enteremos por el internet, que mi nieta estaba mal. Cuando llegamos al hospital ya la estaban atendiendo, la persona que la atropelló estaba ahí. Pero ahora, de un lado no ve, necesita operación. De costillas son grapas que valen 9000 bolivianos, y es que el señor que lo atropelló no aparece, se desentendió”.
La joven presenta múltiples lesiones y según la entrevistada presenta dos costillas rotas y una que está malograda. Habla un poco, pero no recuerda, no sabe ni dónde vive.
“Me reconoce a mí, pero al resto de sus amigas les dice ‘¿quién era?’. Luego se recuerda, pero está mal”, explicó Flores.
Argami es huérfana de padre y madre. Estudiaba y trabajaba para salir adelante. Su abuela, que se sostiene vendiendo caramelos, ahora debe además costear medicamentos, grapas quirúrgicas y gastos hospitalarios sin ayuda de nadie.
“No se sabe cuándo va a recuperar, puede ser un año, dos años, solo me dicen que hay que tener paciencia”.
La versión del conductor involucrado añade controversia. Según Flores, Chavarría alegó que la joven estaba ebria, pero sus amigas lo desmintieron rotundamente. “Ella fue a la serenata y el chofer dijo que estaba borracha, pero sus amigas dijeron que ella estaba sanita, se le ve bien, y los videos lo dan a conocer”.
Lejos de asumir responsabilidades, Chavarría –según denuncia la familia– solo reapareció para confrontar:
“Este sujeto es Elder Chavarría, quien fue solo a agredirme con su abogada, solo a eso, cuando la visitadora social lo ha convocado. Yo tengo que poner techo, prestarme de mi familia”.
La familia pide que el caso no quede impune y hace un llamado urgente a las autoridades y a la ciudadanía. Quienes deseen colaborar pueden acudir directamente al hospital o comunicarse al número 72977397. También piden al Ministerio Público y al fiscal del caso que actúen con celeridad y ayuden a encarar los costos médicos y judiciales.
