Una denuncia por violencia familiar derivó en la apertura de una nueva investigación por el presunto delito de violación en la comunidad de San Andrés del municipio de Tarija. El Ministerio Público decidió actuar de oficio luego de que la víctima, durante su declaración en cámara Gesell, revelara que fue forzada a mantener relaciones sexuales bajo amenaza, por parte de la misma persona denunciada anteriormente por agresión física.
Según se informó de manera preliminar por fuentes policiales, el caso, que ahora suma una acusación mucho más grave, salió a la luz durante el desarrollo de un proceso penal por violencia familiar. En ese contexto, la mujer relató ante peritos especializados que el hecho se habría producido en 2024, cuando ella se encontraba recostada en su domicilio y el agresor ingresó sin permiso a su cuarto. Según la víctima, el sujeto la amenazó con volver a golpearla si no accedía a tener relaciones sexuales. La denuncia fue registrada en el Formulario Único el pasado 2 de junio a primeras horas de la mañana.
A raíz de este testimonio, el Ministerio Público dispuso el inicio inmediato de una investigación por violación, asignando el caso a la División de Delitos Contra las Personas. Las diligencias preliminares ya comenzaron, y se espera que la víctima sea nuevamente convocada para ampliar su declaración con el acompañamiento de personal psicológico.
Este nuevo proceso se suma al ya existente por violencia familiar, en el cual el mismo sindicado enfrenta acusaciones de agresiones físicas y psicológicas contra la denunciante. Desde la Fiscalía se informó que ambos casos serán tramitados de manera paralela, pero con la rigurosidad que amerita un delito de orden sexual. Por su parte, la víctima solicitó medidas de protección ante el temor de represalias, mientras el agresor aún no fue aprehendido.