REDACCIÓN CENTRAL/TINTA ROJA
Tras un mes de juicio oral y contradictorio vía virtual, el Tribunal de Sentencia Tercero de la Capital, decidió liberar a un joven de 23 años de edad quien fue acusado de haber asesinado junto a otra persona a un taxista por la comunidad de Lazareto, el hecho se suscitó en marzo del año 2018.
De acuerdo con lo informado por Fernando Valverde, abogado del ahora declarado libre, el autor del hecho se habría sometido hace tiempo a un procedimiento abreviado y se encuentra cumpliendo su condena en el penal de Morros Blancos.
“Mi defendido ha estado detenido injustamente desde el año 2018 en la cárcel por un hecho que no cometió y por una mala investigación de Ministerio Público. La defensa siempre ha argumentado que E. R. V. (acusado) era inocente y que no estuvo en el lugar del crimen, a pesar de ello el Ministerio Público junto al Órgano Judicial han tenido detenido a un inocente”, dijo Valverde.
El profesional aseguró que existía las pruebas, porque no se realizó ningún acto investigativo ni las pericias en la etapa preparatoria que dura seis meses”, ha añadido.
“El juicio duró aproximadamente un mes, porque recién se ha comenzado las pericias que tenía que haber desarrollado el Ministerio Público ni siquiera tenían las pericias genéticas obtenidas en las uñas de la víctima”, señaló.
El autor material del hecho confesó que solo él (autor material) fue quien le dio las dos pedradas con el que falleció la víctima y luego robó el vehículo.
“Se trató de vincular a mi defendido en el proceso de asesinato, a través de informes que no estaban en la realidad y bajo la intención de buscar culpables y no así justicia, puesto que se buscó culpables teniéndose detenido al autor material, no sabemos conque intensión”, finalizó.
Antecedentes
Entre los antecedentes que se tiene, la víctima habría salido a trabajar como taxista el 8 de marzo de 2018 y subió a su motorizado a un sujeto a la altura de la parada al Norte y se dirige a la comunidad de Lazareto, donde fue victimado por el sujeto quien con dos pedradas le produjo una herida mortal.