Willam Octavio Flores/EL ANDALUZ

El Barrio Catedral se encuentra sumida en un conflicto por el reconocimiento de su directiva barrial. Daniela Urioste, expresidenta del barrio, ha denunciado públicamente a Cecilio Pimentel, máxima autoridad de la Federación Departamental de Juntas Vecinales FEDJUVE, Tarija, por desconocer a la mesa directiva electa de manera democrática e intentar imponer a otro grupo afín.

“Queremos denunciar, como Barrio Catedral, al señor Cecilio Pimentel por tratar de desconocer a la directiva que escogió el barrio y reconocer a otra directiva”, declaró Urioste en un tono enérgico. Según su testimonio, los vecinos se volvieron a reunir el pasado domingo para ratificar a la mesa directiva que asumió por sucesión tras el cambio de autoridades.

La exmandataria barrial acusa a Pimentel de anteponer supuestos “caprichos políticos” a la voluntad expresada por los vecinos en asamblea. “Le pedimos que él tiene que hacer caso a los vecinos, no por una señorita por caprichos o qué sé yo políticos”, subrayó.

En el trasfondo de la disputa está la controvertida figura de la actual vicepresidenta del Comité Cívico de Tarija, a quien Urioste señala como la persona a la que Pimentel estaría intentando imponer como máxima autoridad del Barrio Catedral a Marianela Olarte Burgos.

“Ella ahora mismo es vicepresidenta del Comité Cívico, ¿qué clase de vicepresidenta tiene que no tiene ética ni moral la chica, no?”, cuestionó Urioste con tono de indignación. “Quiero decir públicamente que ella no es presidenta de nuestro Barrio Catedral por asamblea magna, la desconocimos porque ella no ha hecho nada por el barrio”.

La expresidenta afirmo el vecino Ángel Camata Quispe, es el actual presidenta del Barrio Catedral, elección que, según denuncia, Pimentel se niega a reconocer aduciendo un supuestas actas falsas.

Urioste argumenta que los integrantes de la directiva paralela promovida por Pimentel no cumplían con los requisitos estatutarios, ya que pertenecían al antiguo directorio pero habían dejado de asistir a las reuniones obligatorias, lo que implica su destitución automática.

“Eran del directorio pero nunca asistieron a la vida orgánica, que automáticamente por nuestros estatutos, de 3 a 5 reuniones, estás automáticamente afuera”, explicó. “Y esa gente es la de adentro, y gente nueva que eso se tendría que haber aprobado en una asamblea. Han aprobado en cuatro paredes donde Cecilio, y otras personas más que son unos corruptos para mí, que no hacen caso a lo que dice la Asamblea Magna”.

En medio de acusaciones cruzadas de corrupción e injerencias políticas externas, Urioste reafirmó que la decisión de los vecinos debe prevalecer sobre cualquier imposición de autoridades ajenas al barrio. “La Asamblea Magna, el vecino manda y tenemos derecho a voto y tenemos derecho a que ellos hagan caso a lo que el vecino dice”.

Por su parte, Ángel Camata Quispe, fue presentado por Urioste como la presidenta legítima por haber asumido el cargo por sucesión, respaldada por el voto de los vecinos del Barrio Catedral.

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