Vía Página Siete
Bounou vuelve a ser figura en el 1-0 y despide a la selección de Cristiano Ronaldo.
Marruecos llegó a la Copa del Mundo para hacer historia, pero aún no decide su final. Tras sorprender en la fase de grupos al clasificar primero y eliminar a España en octavos, el equipo africano continúa su camino en el torneo tras derribar a otro grande de Europa: Portugal.
Los de Fernando Santos llegaban al encuentro con la seguridad reforzada tras su goleada contra Suiza, pero en 90 minutos no pudieron vencer a un magnífico Bounou y cayeron 1-0 frente a los marroquíes.
Los primeros minutos arrancaron con un ida y vuelta que prometía un gran partido. Joao Félix, a los 4, y En-Nesyri, a los 5, mostraron los primeros chispazos en un encuentro que iniciaba nuevamente con Cristiano Ronaldo en el banquillo.
A medida que pasaba el tiempo, Portugal se hizo con la posesión del balón, pero Marruecos no renunciaba al ataque e incomodaba a la defensa lusa con sus contragolpes.
A los 30’, Joao Félix tuvo una de las más claras con un disparo desde la frontal desviado por un defensa por encima del travesaño. Minutos después, respondió Selim Amallah que recibió el balón en el corazón del área, pero su remate se fue alto.
El último cuarto de hora de la primera parte fueron los mejores minutos de los ‘Leones del Atlas’, que pudieron adelantarse con otro disparo de Sofiane Boufal detenido por Diogo Costa.
Cuando parecía que los seleccionados se irían a los vestuarios con el marcador en blanco, el equipo africano dio la sorpresa y marcó el 1-0. Una mala salida de Diego Costa fue aprovechada por En-Nesyri, que de cabeza puso a su selección al frente.
El segundo tiempo contó con el equipo de Fernando Santos más volcado al ataque. Bounou fue exigido en varias ocasiones, pero los portugueses no encontraron el camino al gol.
Cristiano Ronaldo ingresó a los 51 y sumó un nuevo récord en su carrera al jugar su partido 196 con el escudo de Portugal e igualar el récord mundial de partidos internacionales de selecciones que detentaba el kuwaití Bader al-Mutawa. Pero ese logro debió saber agridulce ante su imposibilidad de batir el arco marroquí.
Por arriba y por abajo los lusos buscaron el empate, pero entre la imprecisión y los reflejos del arquero del Sevilla, se fueron sin marcar en cuartos de final.
El joven delantero luso Gonçalo Ramos, el héroe de la victoria sobre Suiza en octavos, tuvo el empate en un remate de cabeza que se fue fuera por poco en los 58.
El ex Manchester United, en los 82, fabricó una gran ocasión al dejar un balón en el pico del área para Joao Félix cuyo disparo se encontró con la buena respuesta de Bono.
El portero marroquí volvería a aparecer para detener un disparo raso de CR7 (90) en lo que fue la última ocasión clara para revertir el resultado.
Los últimos minutos de descuento, Marruecos se quedó con diez por la salida de Cheddira por doble amonestación (90+3), pero lograría aguantar hasta completar la gesta y seguir su camino de matagigantes en Catar.
Así, los de Walid Regragui se alzan como la primera selección de África que logra acceder a las semifinales en toda la historia. Enfrentarán la próxima semana al ganador entre Inglaterra y Francia en la segunda semifinal.
