Por Rosy Sánchez/El Andaluz
El presidente del Colegio de Economistas de Tarija, Fernando Romero, indicó que luego de que la gobierna nacional admitió que existen dificultades económicas para realizar la adquisición de combustibles y propuso comercializar los carburantes a precio internacional, esta determinación ocasionará conflictos sociales y especulación en los precios.
“Ante la alta demanda y la baja oferta, en algunas partes del área rural ya esta costando entre 20 y 25 bolivianos el litro de gasolina y diésel lo que ha generado molestia en diferentes sectarias, se podría iniciar una especie de guerra por el tema de los carburantes que en gestiones pasadas a llegado hasta los golpes”, alertó.
Fernando Romero dijo que sector hidrocarburífero ha reconocido que no es posible cubrir la demanda interna de combustible, situación que ocasionará efectos nocivos a la economía nacional con la cuida de inversión y mayor desempleo.
“Hay que recalcar que la escasez de carburantes tiene tres problemas bien definidos; el primero la subvención a los combustibles que generan hechos ilícitos como el contrabando; un segundo factor es la falta de divisas para cancelar a los proveedores y un tercer aspecto política hidrocarburífera y energética que solo se ha dedicado a consumir las reservas”, cuestionó el economista.
Osmar