Un sujeto de 25 años fue sentenciado a 22 años de prisión por el delito de violación a una adolescente, tras un fallo judicial que causo gran conmoción en la región. La sentencia fue dictada luego de que la víctima, una joven menor de edad, lograra relatar con detalles los hechos en una cámara Gesell, lo que permitió calificar el caso como violación en lugar de estupro, como inicialmente se había calificado.
Según informó, Pablo Paredes, asesor legal de la Defensoría de la Niñez y Adolescencia, el hecho ocurrió cuando la adolescente, que había establecido contacto con el agresor a través de internet, quien se hizo pasar por narcotraficante y la amenazó con hacerle daño a su familia. El hombre, originario de Santa Cruz llegó a Tarija, aprovechó el engaño y la intimidación para trasladar a la menor a un alojamiento, donde la obligó a mantener relaciones sexuales bajo amenazas de daño a sus seres queridos.
La familia de la víctima, al notar la ausencia de la joven, montó un operativo de búsqueda. Fue un tío de la menor quien logró encontrarla en la terminal de buses de nuestra ciudad, justo cuando el agresor intentaba llevársela a otro destino. En un primer momento, el agresor trató de justificar el acto diciendo que la víctima era su pareja, por lo que inicialmente el caso fue calificado como estupro.
Sin embargo, tras el interrogatorio en la cámara Gesell y la detención preventiva de este individuo, la jovencita reveló la verdad de lo sucedido. Su declaración detallada de la víctima permitió a la justicia modificar la tipificación del delito a violación, considerando la gravedad de los hechos, que incluyeron la transmisión de una enfermedad de transmisión sexual, lo que fue considerado como un agravante en la condena. La jueza, al valorar todas las pruebas presentadas, resolvió imponer una pena de 22 años de prisión al agresor, aplicando la figura penal del artículo 310 del Código Penal, referente a violación, con la agravante por contagio de enfermedad.
Paredes, destacó que este caso marca un importante precedente para el tratamiento judicial de las víctimas de abuso sexual.
«Este fallo no solo refleja la seriedad con la que se deben tratar estos casos, sino que también constituye un mensaje claro de que la justicia boliviana está comprometida con la protección de los derechos de los menores», señaló el servidor público.
Asimismo, destacó que la Policía, el Ministerio Público y la Defensoría del Pueblo reiteraron su compromiso para continuar con las investigaciones en otros casos similares, y evitar que queden en la impunidad.
«Este sujeto se sometió al proceso abreviado, pero ahora se abre una puerta para que casos como este sean tratados con la veracidad y el respeto que merecen las víctimas», concluyó el abogado.