Por Rosy Sánchez/El Andaluz
El hospital San Juan de Dios de Tarija, en los últimos días se ha visto envuelto en una serie de críticas y denuncias de presunta negligencia médica y mala atención a los pacientes por diferentes falencias que presenta desde la infraestructura, equipamiento, dotación de medicamentos y falta de personal.
La Asambleísta departamental, Karina Cachambi, señaló que en la última inspección realizada a este establecimiento de salud de tercer nivel se observó una serie de deficiencias que pone en riesgo la atención oportuna de pacientes que acuden diariamente al hospital.
“Este hospital está totalmente olvidado, su infraestructura se está cayendo a pedazos, si visitamos se van a dar cuenta que existen chorreras en el techo cuando llueve, los grifos de los baños que están constantemente botando el agua, además de falta de limpieza por el escaso personal”, refirió Cachambi.
Respecto a la atención misma de salud, la asambleísta mencionó que el hospital registra un hacinamiento de los pacientes, carencia de medicamentos e insumos que obliga a los familiares a comprar de farmacias privadas. A esto se suma los exámenes de laboratorios que no pueden realizarse por el deterioro de los equipos como; rayos X y el tomógrafo.
Ante estas falencias, Karina Cachambi exige una auditoría técnica y administrativa para establecer el grado de responsabilidad que tiene la Gobernación del Departamento, tomando en cuenta que es competencia de esta institución brindar las condiciones a los establecimientos de salud de tercer nivel.
“No se puede culpar únicamente al personal de salud la situación que se da en el hospital, evidentemente si hay algún grado de participación y responsabilidad del personal médico se tiene que proceder y sancionar, pero también se debe hacer estas dos auditorías técnica y administrativa para una atención integral”, señaló la asambleísta.
La pasada semana la Gobernación del departamento de Tarija instruyó al SEDES realizar una auditoría médica en el Hospital Regional San Juan de Dios, por una serie de denuncias de presunta negligencia médica y falencias en la atención a los pacientes.
Esta determinación se asume tras registrarse el fallecimiento de una paciente de sexto femenino, hecho denunciado públicamente por su familia como una posible negligencia médica por parte del personal de este nosocomio.