Natalia López/El Andaluz
El ministro de Gobierno, Eduardo del Castillo, anunció que se han arrestado a 17 personas, en su mayoría militares, en relación con un «golpe de Estado fallido» en Bolivia. Las primeras investigaciones sugieren que este complot se había estado planeando desde mayo de este año, y se ha identificado a un ideólogo detrás de este intento.
En una conferencia de prensa, del Castillo presentó a los últimos detenidos junto con un organigrama que muestra a los presuntos involucrados y sus roles. Aunque el organigrama incluye muchos nombres, el ministro aclaró que no abarca a todos los participantes. Este golpe fallido dejó un saldo de 12 heridos y el grupo de «preparación y planificación» es el más destacado, liderado por Juan José Zúñiga, excomandante del Ejército, y Juan Arnez Salvador, excomandante de la Armada.
El ministro también mencionó que la Policía está en busca de tres militares del servicio pasivo, destacando al general Tomás Peña y Lillo, cuyo paradero es desconocido. La esposa de Peña y Lillo denunció acoso por parte de la Policía y afirmó no saber dónde está su esposo. Según del Castillo, familiares de Peña y Lillo arrojaron una bolsa con municiones y estopines en la parte trasera de su domicilio.
Finalmente, del Castillo hizo un llamado a la población para ayudar en la captura del mayor Miguel Ángel Burgos, quien, según informes de inteligencia, daba instrucciones directas a los militares en la plaza Murillo. Este mayor ha sido identificado como una figura clave en la coordinación del golpe.