Natalia López/El Andaluz
El despliegue militar comenzó la tarde de este miércoles tras la decisión de cambiar el comandante al General José Wilson Sánchez. Este nuevo comandante ha ordenado a las fuerzas armadas retirarse de la Plaza Murillo, lo que ha llevado a una movilización de tropas que ya se están replegando en El Alto y trasladándose a sus respectivos cuarteles desde la sede de gobierno.
La gran interrogante que surge entre la población es: ¿qué sucederá con el General Juan José Zuñiga? Su futuro es incierto mientras se observan estos movimientos en las fuerzas armadas. El cambio en el liderazgo militar genera expectativas y dudas sobre las próximas decisiones y sus implicaciones para la estabilidad del país.
En Santa Cruz de la Sierra, la situación también es tensa. Los policías permanecen encuartelados en sus unidades, incluidos los equipos antimotines y de inteligencia. Están a puertas cerradas, en espera de instrucciones de una autoridad superior, lo que refleja la incertidumbre y el alto nivel de alerta en las fuerzas del orden.
Este panorama refleja un momento de alta tensión y reconfiguración en las fuerzas militares y policiales de Bolivia, con decisiones clave que podrían influir significativamente en la estabilidad y el orden público del país.
