El Andaluz / Yacuiba
La oficina del Control Social de Salud, instalada en un espacio pequeño del hospital Rubén Zelaya, amaneció ayer completamente vacía, sin los documentos y la computadora que poseía. Reyna Plata, representante de la agrupación, denunció desmantelamiento y apuntó a la secretaria municipal de salud, Alba Riffarach.
“Creemos que tenían un duplicado de la llave o bien han cambiado de chapa, pero han entrado y sacado todo. Tiene que haber una orden de alguien, pero el administrador lo desconoce. Creo que se trata de la Secretaria Municipal de Salud, pero espero estar equivocada. Nos ha costado conseguir el lugar y el equipamiento para atender a la gente más humilde”, indicó Plata.
No obstante, indicó que lograron contactar al alcalde de Yacuiba, Ramiro Vallejos, quien aseguró desconocer tal situación y se mostró molesto por el desalojo.
Este espacio brindaba orientación y ayuda a aquellas personas, sobre todo de escasos recursos, que acudían al nosocomio en busca de atención médica. Tras una reunión, el administrador comprometió la devolución de todo bajo inventario hasta esta jornada.
La representante detalló que en la oficina había una computadora, escritorios y documentación de gestiones y respuestas de los gobiernos nacional, regional y municipal. “Nuestro trabajo no es valorado lastimosamente por algunas autoridades y funcionarios públicos, a ellos no les gusta que la población más humilde tenga ese respaldo. Nosotros no cobramos un sueldo, lo hacemos para ayudar. Creemos que ese fue el motivo para venirnos a desmantelar”.