Por Rosy Sánchez/El Andaluz
Los altos índices de inseguridad y el incremento de consumo de bebidas alcohólicas en adolescentes, llama a las autoridades y padres de familia a asumir medidas inmediatas para evitar consecuencias graves para la salud emocional y física.
Ante esta alerta, la concejal Municipal de Cercado, Adriana Romero solicitó al Viceministerio de Seguridad Ciudadana la reactivación del programa «Mochila Segura», mismo que en su momento brindó resultados positivos en su implementación.
«Este plan lo que hacia era revisar la mochila de los estudiantes para ver si estos tenían estupefacientes, bebidas y otros. Y se han encontrado desde armas blancas, e incluso hasta mariguana», señaló.
En ese sentido Adriana Romero indicó que se solicitará al viceministerio de Seguridad Ciudadana para que a partir de la gestión 2026, el programa vuelva a reactivarse en las unidades educativas
«Vamos a buscar alianzas también con otras instituciones para que este programa pueda ser implementado tanto en el departamento de Tarija y a nivel nacional, estamos seguros que vamos a tener buenos resultados para nuestros adolescentes», dijo la autoridad.
Así mismo, la concejal señaló que se tiene el respaldo de la Junta Distrital de padres de familia de Cercado para impulsar la reactivación de este programa «Mochila Segura».
«Se han hecho reuniones desde el año pasado, nos hemos reunido con más padres de más de 120 Unidades Educativas donde si primer punto era la reactivación de este plan porque se ha tomado conocimiento de algunas conductas ilícitas dentro de los colegios», expresó.
Romero lamentó que por el desacuerdo de algunos padres de familia que se opusieron a los controles por presuntamente «violar la privacidad» de los estudiantes, el programa fue suspendido.
Ante los últimos acontecimientos dentro los establecimientos educativos, la concejal Romero considera necesario retomar los controles para prevenir hechos ilícitos que generan inseguridad.
Protocolo de Violencia
La gestión 2018 el ministerio de Educación aprobó el Protocolo de Prevención, Actuación y Denuncia en casos de Violencia en Unidades Educativas de Bolivia.
El mismo tiene como objetivo establecer procedimientos para la atención oportuna, efectiva y reparadora de situaciones de violencia y acoso en el ámbito escolar, sin embargo, no ha cumplido su cometido.
Adriana Romero señaló que este protocolo debía reemplazar al programa mochila segura, pero por desconocimiento e inaplicabilidad no ha generado los resultados esperados.
«No se están realizando las acciones necesarias de las instituciones que debían participar, en ese sentido vemos que no sirve ese protocolo porque no ha sido aplicado correctamente por tanto exigimos que Mochila Segura vuelva «, dijo Romero.
Consultado sobre el tema, el director Distrital de Educación de Cercado, indicó que si bien se realizaron reuniones para retomar el programa, existe una disposición que prohíbe ejecutarlo porque afecta a la intimidad de los estudiantes.
«Ante esta disposición se tienen que hacer todos los esfuerzos en el marco de los planes de convivencia pacífica y armónica en las unidades educativas. Se debe seguir controlando, no exacta3en los términos del programa mochila segura», dijo la autoridad educativa.
Casos de violencia
Otro tema que genera pro ocupación a las autoridades y padres de familias, son los hechos de presunto abuso sexual de maestros a estudiantes, a mayo de la gestión 2024 se registraron cuatro casos en unidades educativas de la cuidad de Tarija.
Adriana Romero señaló que con la reactivación del plan de «Mochila Segura», también se deberán asumir medidas protección a los adolescentes antes estos abusos generados por maestros y administrativos.
«Debemos reflexionar y buscar la manera de proteger a nosotros adolescentes y de cuidarlos, no solo en el colegio sino también desde nuestros hogares», acotó Adriana Romero Concejal Municipal
Mochila segura
El plan “Mochila segura” tenía la misión principal de detectar la tenencia y consumo de drogas por parte de los estudiantes. En 2020 la Defensoría del Pueblo cuestionó su aplicación argumentando que se vulneraban los derechos de los escolares.
El personal ingresaba a las escuelas y a las aulas a revisar las mochilas de los alumnos, además de dar charlas de concientización sobre el consumo de drogas. Si se detectaba a un menor en posesión de sustancias u objetos prohibidos, se lo remitía a la DNA o al Intraid, dependiendo del caso.






