Lo que inició como una investigación por sustracción de prenda aduanera terminó revelando un caso más complejo de contrabando, posesión ilegal de armas y posible encubrimiento. La intervención fue realizada por personal de la fuerza anticrimen, luego de varios requerimientos fiscales emitidos en el marco de las pesquisas.
La operación se llevó a cabo el pasado jueves, cuando en un allanamiento realizado en un garaje del barrio Morros Blancos se logró ubicar un camión sin placa de control. El motorizado, según las investigaciones preliminares, habría sido sustraído de predios pertenecientes a la Aduana Nacional.
“Se trata de un vehículo tipo camión que no contaba con placa de control visible”, señaló Wilson Miranda, director de la Fuerza Especial de Lucha Contra el Crimen (Felc-c) durante la intervención. En un primer momento, una mujer declaró que su ex pareja fue quien solicitó almacenar los motorizados en ese lugar, lo que despertó aún más sospechas.
Horas más tarde, los investigadores se trasladaron hasta el barrio San Gerónimo, donde se efectuó otro allanamiento. En el interior del inmueble se encontraron varias cajas de cigarrillos de contrabando, prendas de vestir pertenecientes a funcionarios aduaneros y un arma de fuego calibre 22 con cinco proyectiles. Por este hallazgo, uno de los implicados pasó de arrestado a aprehendido por el delito de porte y tenencia ilícita de arma de fuego.
En total, se incautaron siete cajas de cartón conteniendo cigarrillos, así como vestimenta oficial de uso exclusivo del personal aduanero. Además, se informó que hay una segunda persona aprehendida, y ambas se encuentran a la espera de su audiencia de medidas cautelares.
El caso continúa en etapa de investigación, y se prevé que en los próximos días se realicen nuevas acciones operativas para esclarecer por completo el origen de los objetos y motorizados recuperados.
