Un nuevo caso de estafa mediante redes sociales fue denunciado ante la Fuerza Especial de Lucha Contra el Crimen (Felcc), esta vez en el barrio San Roque, donde una joven profesional fue víctima de un aparente vendedor que le ofreció impresoras a precio de oferta y que, tras recibir una transferencia bancaria de 14.500 bolivianos, desapareció sin entregar el producto.
Según informe preliminar policial, el hecho, que tuvo lugar el pasado 30 de mayo cerca de las 10:00 de la mañana, inició a través de un contacto virtual en redes sociales, donde la víctima identificó una supuesta oferta de equipos de impresión. Luego de intercambiar mensajes, coordinar detalles y recibir lo que parecían ser garantías mínimas, decidió confiar y transferir la suma completa a una cuenta proporcionada por el supuesto comerciante.
Una vez confirmada la transferencia, el vendedor cortó toda comunicación. La víctima, al notar el silencio repentino y la falta de respuestas, intentó contactarse por diferentes vías, pero fue bloqueada en todos los canales posibles. Sin más recursos, se presentó al día siguiente en dependencias de la Felcc para presentar la denuncia formal por el delito de estafa.
El caso fue asignado a un investigador de la unidad, quien ya inició el rastreo del número de cuenta, los datos bancarios y las direcciones IP asociadas al perfil usado para cometer el hecho. Según los primeros indicios, no se descarta que se trate de una modalidad de estafa cibernética operada desde redes organizadas que emplean nombres falsos, cuentas clonadas y perfiles temporales para captar víctimas confiadas.
