Osmar Arroyo/El Andaluz
Tras la firma de un convenio del gobierno boliviano con Irán para el desarrollo en tierras raras, varias autoridades se pronunciaron, mostrando preocupación por el inicio de actividad minera en esas áreas, por el impacto ambiental que se tendría.
El ingeniero geólogo, Daniel Centeno indicó a El Andaluz que realizó trabajos de investigación, los que publicó en varios libros de su autoría.
Mencionó que ha descubierto minerales convencionales, como titanio, aluminio, cromo, vanadio, oro de carácter sedimentario hace millones de años y también de origen hidrotermal, en el departamento de Tarija.
«No tenemos que tenerle miedo nosotros a la explotación de los minerales, ya hay técnicas modernas para poder realizar un control sistemático, para no dañar el medio ambiente», expresó.
Mencionó que también se encontró en Tarija otros minerales, lantano y escandio, dos de las 17 tierras raras, además, encontró minerales de torio y uranio.
Los minerales se hicieron certificar por torio y uranio, pero no para lantano y escandio, resaltando que estos dos yacimientos también se tienen tierras raras.
«Tarija, ese pedacito de tierra de 37.623 kilómetros cuadrados, encierra una potencialidad enorme para descubrir minerales, que ya los he descubierto, hidrocarburos que ya han Sido descubiertos y todavía se puede descubrir mucho más y en todo el departamento se pueden descubrir grandes reservorios de agua», afirmó.
Remarcó que, hasta el momento se han descubierto dos zonas con tierras raras en el departamento.
El geólogo tarijeño busca apoyo, para realizar el análisis de otras muestras de minerales, porque tienen un costo elevado.
Las muestras se tienen que mandar a la ciudad de Oruro y destacó que muestras que mandó a dos empresas de esa ciudad, una de ellas, mandó las muestras a Lima-Perú y a Canadá, los resultados coinciden, por lo que resaltó el trabajo en Oruro.
Para desarrollar tierras raras, indicó que se requieren de grandes inversiones y que no será fácil de encontrar.
Señaló que los descubrimientos que él realizó, le llevaron 50 años de trabajo, varias investigaciones que ya fueron publicadas y otras, que se preparan para ser publicadas.
«Los tarijeños somos ricos. ¿Y ahora qué hacemos?», concluyó.