Un feto de aproximadamente 25 semanas de gestación fue encontrado este martes en horas de la mañana en la avenida Luis Espinal, del barrio Narciso Campero de la ciudad de Tarija, este estaba dentro de una botella de plástico cortado por la mitad. El macabro descubrimiento fue realizado por un vendedor ambulante que, al pasar por el lugar, notó que algo extraño sobresalía de una bolsa en cuyo interior estaba el envase, lo que lo llevó a verificar y dar aviso a la Policía.
Según testigos, el feto fue hallado en un estado avanzado de descomposición, y aparentemente había sido arrastrado por varios perros callejeros antes de ser dejado allí.
Se conoció que, el feto, no mostró signos de haber respirado, lo que confirma que nació sin vida. Sin embargo, lo más impactante del caso fue la condición en la que se encontraba la cabecita del bebé: severamente dañada, al parecer, por mordeduras de perros
El cadáver fue trasladado de inmediato a la morgue del hospital local, donde se procedió a realizar la autopsia y se determinó que el hecho habría ocurrido alrededor de tres días antes del hallazgo.