Por Rosy Sánchez/El Andaluz
Tras la decisión del gobierno argentino de construir una cerca de alambre de 200 metros en la frontera con Bolivia, la Canciller General del Estado, Celinda Sosa señaló que el gobierno de país vecino está en su pleno derecho de implementar políticas de protección y lucha contra acciones ilícitas, sin embargo, se deben respetar los acuerdos bilaterales.
Celinda Sosa dijo que están en tratativas con autoridades de Argentina para generar un espacio de diálogo entre ambos países y continuar con las relaciones diplomáticas en el marco de la buena hermanda y entendimiento.
“Nosotros queremos encontrar alternativas que nos permitan cumplir con todos los acuerdos establecidos en la agenda que tenemos con ese país, no es solo el tema de controles a las actividades ilícitas, está el tema de la vinculación caminera, la agenda comercial, agenda migratoria, y la agenda más grande que es el Mercosur”, detalló la Canciller.
La autoridad nacional dijo que todos estos temas son de interés para ambos países y es menester entablar mesas de conversación para cumplir con la agenda bilateral construida en el marco de las relaciones diplomáticas entre autoridades.
Por su parte el asambleísta departamental por el municipio de Bermejo, Rubén Reyes cuestionó la falta de interés de las autoridades nacionales que hasta la fecha se mantuvieron en silencio y al margen de proponer mecanismos de buen entendimiento con el vecino país y bajar las tenciones.
“Las autoridades nacionales, como cancillería no hacen nada para mejorar el buen relacionamiento que ya por hecho están distanciadas, recordemos que hay una actitud del presidente de Bolivia distante con el de Argentina y viceversa, sin embargo, para nuestro país es fundamental un buen relacionamiento por la situación económica que estamos atravesando”, expreso el asambleísta.
De igual forma cuestionó la medida del Gobernador de la Provincia de Salta que anunció el corte del servicio de pagos de beneficios sociales a ciudadanos bolivianos que residen en el vecino país, mismos que han que han aportado por más de 30 años para su jubilación, que hoy se ve afectada por el distanciamiento entre ambos países.
“Los muros más peligrosos y perjudiciales no son esos enmallados, son las actitudes indolentes de autoridades bolivianas que no hacen absolutamente nada desde cancillería para tener un relacionamiento con ese país y hace que se levanten muros en las actitudes de autoridades argentinas”, manifestó Rubén Reyes.
Respecto al tema, la Canciller Celinda Sosa dejo en claro que cada país puede tiene el derecho de asumir las medidas que crea pertinentes, siempre y cuando no se afecten los derechos de los ciudadanos, más aún cuando Bolivia cuenta con gran número de migrantes que salen del país por fuentes laborales.