El caso del ex presidente de Bolivia, Evo Morales, continúa bajo investigación por presuntos vínculos con la trata de personas. Por tal la Policía intensificó el control migratorio en las fronteras del país para evitar cualquier intento de fuga o evasión del ex mandatario, quien sigue siendo un objetivo clave en las investigaciones.
Según el subcomandante de la Policía de Tarija, Sergio Pascual, las instrucciones para el monitoreo en puntos fronterizos como Vilamontes, Bermejo y Yacuiba son claras: mantener un control permanente las 24 horas del día. Este esfuerzo no solo abarca el caso de Morales, sino también todas las alertas migratorias, que son monitoreadas para detectar cualquier irregularidad que pueda implicar a personas con antecedentes legales.
«Los comandos departamentales siguen ejecutando operativos rutinarios y vigilando constantemente las fronteras para evitar que cualquier sospechoso intente cruzar sin ser detectado», aseveró Pascual.