Natalia López/El Andaluz
Vecinos del Barrio San Luis han expresado su preocupación ante la empresa de servicios de agua y alcantarillado COSAALT por la creciente presencia de malos olores provenientes de las lagunas de oxidación cercanas, los habitantes afirman que el ácido sulfhídrico, responsable de los olores desagradables, está afectando la calidad de vida en el área, especialmente durante las horas más calurosas del día y que incluso hace pocos días se afirmó que está despertando la enfermedad de cáncer en algunas personas.
Por ello, han solicitado a la empresa que se realicen trabajos de limpieza y mantenimiento en dichas lagunas para reducir este impacto negativo.
Gabriela Panique, presidenta del Barrio San Luis, declaró que “Terminamos este año nuevamente sin novedades y que las autoridades continúan sin atender las necesidades barriales”. A pesar de la audiencia pública que se realizó en la Asamblea Departamental en donde se trataron puntos como las medidas que se deberían tomar, aún no se concretó nada.
La población local ha estado lidiando con este problema desde hace tiempo, y consideran que la falta de acción por parte de las autoridades pertinentes está prolongando una situación insostenible. Argumentan que las lagunas de oxidación, si no se mantienen adecuadamente, se convierten en una fuente constante de contaminación olfativa y posiblemente también de problemas de salud. En ese sentido, los vecinos enfatizan que es necesario que COSAALT tome urgentes estrategias para asegurar que las instalaciones cumplan con las normativas ambientales.
La solicitud de los vecinos no solo se limita a la limpieza de las lagunas, sino que también piden un monitoreo más frecuente de los niveles de ácido sulfhídrico y la implementación de planes de mitigación a largo plazo. Algunos residentes han manifestado su preocupación por el riesgo que este gas tóxico puede representar para la salud, especialmente para los más vulnerables, como los niños y los ancianos. Además, se ha sugerido que una comunicación más directa y transparente por parte de la empresa con la junta barrial, contribuiría a aliviar la incertidumbre que sienten los vecinos.
Panique afirmó que junto a los vecinos esperan que COSAALT responda con prontitud a su llamado y realice las acciones necesarias para controlar el impacto del ácido sulfhídrico. Mientras tanto, insistirán en que se busque una pronta solución a la planta de tratamiento de aguas residuales.