Willam Octavio Flores/EL ANDALUZ
Gira detalló las conclusiones de una reciente reunión del movimiento cívico nacional en Cochabamba y las acciones que están demandando para esclarecer la situación.
“Ya estaba programada esta reunión que se llevó adelante en Cochabamba del movimiento cívico a nivel nacional”, explicó Gira, destacando la urgencia del encuentro dado el contexto político actual. El presidente del Comité Cívico señaló que durante la reunión se realizó un análisis profundo de la coyuntura política, centrándose en los eventos del 26 de junio.
Gira reveló que en la reunión surgieron diversas posturas sobre cómo interpretar los acontecimientos: “Había posturas sobre si se trata de un golpe o un autogolpe”. Sin embargo, enfatizó que tras las deliberaciones, se llegó a una conclusión más amplia: “Se ha llegado a la conclusión que es una crisis de poder, una desinstitucionalización, una crisis política”.
Ante esta situación, el movimiento cívico ha tomado una postura clara. “Estamos pidiendo que se conforme una comisión mixta de lo que viene a ser la Asamblea Plurinacional para que se haga la investigación correspondiente”, afirmó Gira. Esta petición busca que se realice una investigación interna exhaustiva sobre los eventos, involucrando a representantes de diferentes sectores políticos.
Sin embargo, el Comité Cívico no se limita a pedir una investigación nacional. Gira anunció que están solicitando la intervención de un organismo internacional: “Estamos pidiendo a la Organización de Estados Americanos (OEA) que pueda enviar una comisión de alto nivel que pueda hacer una investigación a profundidad”. Esta solicitud se basa en la gravedad de los hechos y la necesidad de una evaluación imparcial.
El presidente del Comité Cívico argumentó la legitimidad de esta petición: “Siendo Bolivia signataria de la Organización de Estados Americanos, está en su facultad poder también pedir que esta comisión se pueda hacer presente en nuestro país”. Gira enfatizó que, independientemente de si se trató de un golpe o un autogolpe, los eventos han tenido un impacto significativo en la imagen de Bolivia y podrían generar una crisis a nivel internacional.
La preocupación del Comité Cívico va más allá de la imagen internacional del país. Gira señaló que los acontecimientos del 26 de junio han tenido repercusiones internas significativas: “Ha creado una psicosis social”. Describió escenas de pánico en varios departamentos, con ciudadanos apresurándose a los mercados y estaciones de combustible, creando un ambiente de malestar y ansiedad en la población.
“Hemos sido testigos en todos los departamentos de escenas preocupantes de gente recurriendo a los mercados, yendo a ver el tema de los combustibles”, relató Gira, ilustrando el impacto inmediato que tuvieron los eventos en la vida cotidiana de los bolivianos.
El líder cívico insistió en la necesidad de una evaluación externa: “La Organización de Estados Americanos tiene que enviar una comisión para que pueda hacer una evaluación a priori por el momento, de qué es lo que ha pasado este 26 de junio del presente año”. Esta petición refleja la desconfianza en la capacidad o voluntad de las instituciones nacionales para realizar una investigación imparcial y exhaustiva.
La postura del Comité Cívico de Tarija se enmarca en un contexto de creciente tensión política en Bolivia. Los eventos del 26 de junio han reavivado debates sobre la estabilidad democrática del país y la legitimidad de sus instituciones. La solicitud de una investigación internacional, particularmente por parte de la OEA, evoca recuerdos de la crisis política de 2019, cuando una auditoría de la OEA sobre las elecciones presidenciales jugó un papel crucial en los acontecimientos que llevaron a la renuncia del entonces presidente Evo Morales.