Willam Octavio Flores/EL ANDALUZ
En un operativo realizado por el Grupo de Reacción Inmediata Aduanera (GRIA) en la comunidad de Palos Blancos, municipio de Entre Ríos, la Aduana Nacional logró retener un vehículo tipo ómnibus que transportaba 8,5 toneladas de harina de trigo de contrabando procedente de Argentina. Claudia Aguirre, directora de la Aduana Regional Tarija, informó que la mercancía ilegal tiene un valor aproximado de 26.117 bolivianos.
El operativo tuvo lugar durante un control rutinario realizado por el GRIA el pasado 8 de junio alrededor de las 20:30 horas. Una vez detenido el vehículo, los funcionarios aduaneros solicitaron al conductor la documentación de respaldo, la cual no fue presentada por no contar con ella.
“Al proceder a realizar la requisa del interior del bus, nos encontramos con la sorpresa de que el mismo transportaba una enorme cantidad de harina de contrabando. Todo el interior del bus estaba lleno de harina”, detalló Aguirre.
Ante la evidente infracción, se procedió a la retención preventiva del vehículo y la mercancía para fines investigativos. Aguirre enfatizó que además de ser considerado un ilícito tributario que daña la economía nacional, el contrabando de alimentos también representa un riesgo para la salud de la población.
“No se tiene certeza de la procedencia de esta harina ni si cumple con todas las condiciones de calidad exigidas por las autoridades competentes. Por eso, es tan importante combatir este tipo de actividades ilegales”, expresó la directora aduanera.
Aguirre hizo referencia al Reglamento de la Ley General de Aduanas, cuyo artículo 117 prohíbe la importación de productos de consumo, como alimentos, que no cuenten con el registro sanitario emitido por la autoridad correspondiente.
El contrabando de alimentos, especialmente de productos de primera necesidad como la harina, representa un desafío constante para las autoridades aduaneras y sanitarias. Además de evadir los impuestos correspondientes, la mercancía ilegal suele carecer de los controles de calidad y trazabilidad necesarios para garantizar la inocuidad alimentaria.
Por otra parte el sector panadero continúa en emergencia por los altos costos de la harina en todo el departamento, por lo que exigen al gobierno medidas para rebajar los costos de este producto.
Esta harina estaba a punto de ingresar al mercado tarijeño, por lo que los comerciantes que venden estos productos tal vez incrementen sus costos.






