Natalia López/El Andaluz
El hallazgo de dos cuerpos sin vida en el baño del mercado Bicentenario de la avenida Cumavi, en el departamento de Santa Cruz, desencadenó una investigación que desveló un oscuro y desgarrador secreto familiar. En el que un padre y su hijo discapacitado de 15 años perdieron la vida tras ingerir una sustancia venenosa, se convirtió en un doble asesinato cuidadosamente planeado por la esposa y madre de un menor.
A. M. P., Quién era un hombre dedicado a diversas labores para ganarse la vida, incluyendo el cuidado del baño del mercado, el trabajo como zapatero y electricista, fue encontrado sin vida junto a su hijo discapacitado. La investigación a cargo de la Fiscalía Especializada en Delitos Contra la Vida, liderada por la fiscal Rose Mari Barrientos, reveló que la esposa y madre de las víctimas había planeado meticulosamente el acto.
Según los informes forenses, ambos fallecieron a causa de una intoxicación por veneno, cuya administración fue obra de la propia esposa. Esta mujer, cuyo nombre no se ha revelado, confesó haber alimentado un profundo odio hacia su esposo e hijo, lo que la llevó a cometer este atroz acto.
La tragedia no solo afectó a la familia, sino también a la comunidad del mercado, quienes se solidarizaron con Abraham al asumir los gastos del velatorio y funeral ante la ausencia de otros familiares que se hicieran cargo. La hija de 13 años del matrimonio desapareció tras los hechos, lo que desató una búsqueda intensa por parte de la Fiscalía y la Felcc.
Finalmente, la niña fue encontrada en el cementerio, donde intentaba despedirse de sus seres queridos, pero la intervención de las autoridades evitó que su madre se la llevara. En una entrevista psicológica, la niña reveló el terror que vivió aquella fatídica noche, describiendo cómo su madre odiaba a su hermano y a su padre. Ahora ella se encuentra bajo la protección de la Defensoría de la Niñez, la niña se enfrenta a un futuro incierto mientras su madre enfrenta cargos por un doble asesinato cuidadosamente planeado.