Willam Octavio Flores/EL ANDALUZ
Boris Fernández, director de Medio Ambiente del Municipio de Tarija, abordó la preocupación sobre el uso descontrolado de juegos artificiales durante las festividades de fin de año y la necesidad de implementar regulaciones para mitigar los impactos ambientales y de salud.
Fernández señaló que las festividades de fin de año en Tarija se caracterizan por una mayor actividad comercial y el uso extendido de juegos artificiales. La explosión de estos artefactos no solo afecta la tranquilidad de la ciudad, sino que también tiene consecuencias negativas para el medio ambiente, la salud humana y animal.
El director de Medio Ambiente explicó que en la Asamblea Departamental actualmente, existe una ley en proceso que busca regular el uso de estos dispositivos en todo el país, con especial énfasis en evitar la contaminación ambiental y proteger la salud de la población para establecer un control más riguroso sobre el uso de juegos artificiales durante estas celebraciones.
Fernández destacó que los juegos artificiales no solo emiten contaminantes perjudiciales para el medio ambiente, sino que también pueden afectar la salud de niños con problemas respiratorios, personas mayores y animales. La regulación propuesta busca abordar estos problemas, estableciendo normativas claras y sanciones para quienes incumplan con las disposiciones.
Aunque reconoce que ciertos períodos, como el 25 y el 31 de diciembre, son tradicionalmente asociados con el uso de fuegos artificiales, Fernández enfatiza la importancia de establecer límites y normativas claras incluso en estas fechas. La intención es lograr una regulación que permita disfrutar de las festividades de manera segura y sostenible, evitando daños innecesarios al medio ambiente y la salud de la comunidad.
Afectación en animales
Los juegos pirotécnicos y los petardos, además de representar un riesgo por pérdida de miembros y amputaciones, quemaduras, daños oculares y sordera, entre otras consecuencias en el ser humano, para los animales son una verdadera tortura.
Las mascotas sufren en las fiestas de fin de año, debido al exagerado uso de pirotecnia, en especial de las bombas que causan estruendos. Entre las afectaciones que éstas les producen, principalmente, están las relacionadas con su sentido auditivo, como así también miedo, estrés y otros.
Durante las celebraciones de navidad y año nuevo, las mascotas se vuelven nerviosas y temerosas, buscan lugares donde esconderse o cobijarse de los molestos ruidos que ocasionan ciertos fuegos artificiales.
Afectación a niños con autismo
Las personas con autismo también son notablemente afectadas por los fuegos artificiales, los cuales les genera un malestar intenso ante determinados sonidos, olores, luces, sabores o texturas específicas, que pueden pasar desapercibidos o no incomodar a las demás personas.
En el caso de las personas con hipersensibilidad auditiva, los ruidos repentinos y fuertes les pueden afectar muy negativamente, ya que los perciben de una forma más intensa.
Por ello, los petardos y la pirotecnia sonora pueden resultar especialmente molestos para las personas con TEA hipersensibles al ruido, provocándoles irritabilidad, nerviosismo, miedo o ansiedad. Incluso algunas de ellas sienten la necesidad de huir y buscar un sitio tranquilo y seguro.