Comunidad de Entre Ríos clama por revocación de medida ante caso de abuso que data de dos décadas, recién la medida fue ordenada por la jueza Emma Baldivieso.
REDACCIÓN CENTRAL/TINTA ROJA
En una situación que ha despertado una oleada de indignación en una comunidad de Villa Montes, se ha dado a conocer el caso de una menor de 14 años que, según informaciones de los guaraníes de la localidad, fue presuntamente víctima de abuso sexual por parte de un ciudadano ruso identificado como Vladimir Gorelkin. La acusación ha resonado en la región, ya que se alega que el individuo obtuvo una medida de arresto domiciliario pese a la gravedad de los cargos en su contra.
La comunidad, agotada por lo que consideran una presunta injusticia, ha alzado la voz contra lo que describen como un caso que ha tardado décadas en emerger a la luz pública. Según los relatos, Gregorio Soruco, proveniente de Villamontes, ha liderado el clamor comunitario tras denunciar que el acusado, de origen ruso-canadiense y que ha utilizado varios nombres, habría perpetrado el abuso a una niña de 14 años en el pasado.
La situación se ha complicado aún más debido a que el presunto agresor, a pesar de estar detenido en un principio, obtuvo una medida de arresto domiciliario por parte de una jueza local, cuyo razonamiento ha sido cuestionado por la comunidad. «¿Dónde en el código penal se permite que alguien así opere bajo la protección de sus abogados?», exclamó Soruco en medio de la protesta.
La demanda de la comunidad es clara: exigen la revocación de la decisión judicial y la remisión del caso al tribunal de sentencia correspondiente, con el pedido de una condena de 30 años de cárcel para el acusado.
«Estamos aquí para buscar justicia en un caso que ha estado oculto durante dos décadas. Hemos pasado por evaluaciones médicas y psicológicas, y aún así se habla de un proceso abreviado que solicita una pena de seis años cuando lo que debería ser es 30 años», expresó Soruco con determinación.
La madre de la presunta víctima, Etelvina, agregó su voz al coro de exigencias: «Este individuo abusó de muchas menores en Villamontes, y mi hija tuvo el valor de denunciarlo. Sin embargo, la jueza Emma Baldiviezo decidió otorgarle arresto domiciliario. Hemos venido hasta Tarija para pedir que se revoque esta medida. Como madre, lo exijo».
A medida que el caso se despliega, surge la conmovedora historia de la víctima, hoy de 37 años, y su presunto agresor, quien supera los 60 años de edad. La comunidad, movilizada por un anhelo de justicia postergado, busca que este caso no solo alcance nivel nacional, sino que arroje luz sobre una realidad que ha permanecido en las sombras durante demasiado tiempo.