Algunos vecinos de la zona 25 de Julio, en El Alto, creen que el Diablo mora en la casa de David Choque Mamani, sólo así se podría explicar la presencia de 12 cabezas con cuernos esculpidas en esa vivienda, pero el dueño afirma que no es así y que, en realidad, esas figuras “ahuyentan el mal”. El lugar se convirtió en el nuevo atractivo turístico alteño, un sitio que pronto se transformará en un centro esotérico.
Ubicada en la calle Huaricana esquina Muruqullo, una modesta y misteriosa morada con paredes de adobe es desde hace unos días una parada para curiosos que llegan desde diferentes zonas alteñas para tomarse una foto. “Vengo de la zona Primero de Mayo. El diseño es muy interesante. Bueno, cada uno tiene sus creencias y se las debe respetar”, afirma Abel Silva, que ayer llegó al sitio en un vehículo para tomarse una selfie.
Zulma Canaza, una mujer de pollera, no podía creer lo que veía. “¡Ay! Harto miedo da, qué será eso. Yo vivo a unas cuadras, pero no sabía que había esto”, señala acompañada de su hijo y un recién nacido en la espalda.