(Roberto A. Barriga/El Andaluz)
El 28 de junio EL Andaluz publicó una nota titulada “14 PERSONAS ENTRE TRABAJADORAS SEXUALES, POLICÍAS E INTERNOS TUVIERON FIESTA EN MORROS BLANCOS” donde se exponía que a la cárcel ingresaban bebidas alcohólicas y mujeres a ejercer prostitución, todo esto bajo consentimiento de policías, esta información se supo a través de una denuncia que se realizó por a la DIDIPI (Dirección Departamental de Investigación Interna).
Ese mismo día El Andaluz se comunicó con el gobernador de Morros Blancos, Reynaldo Aguilar, y le consultó si conocía sobre estos hechos, respuestas ambiguas y una clara molestia por lo escrito se recibió por parte del verde olivo.
“No sé cuál es el fundamento de la denuncia de su nota, estoy un poco incomodo con este tema” dijo, se le explicó cual alumno de primaria, pero aparentemente no dio resultado.
“Hacen una denuncia y no van a preguntar a la unidad competente, no van a comprobar ahí” dijo en una de sus explicaciones.
A tiempo de aclarar que los policías mencionados en la nota no trabajaban ahí. “Los nombres que pudo observar son de policías que no se cuentan ni destinados aquí en el penal, no entiendo el motivo, parece un copiado y pegado de una nota anterior” expresó para las noticias de Tarija.
Aguilar dijo mentiras, y contradicciones, pero la más importante es la referida a los nombres de los policías de denunciados, la denuncia del DIDIPI llegó a manos de EL andaluz.
En la misma se supo que existe la denuncia en contra del teniente Silvestre Ríos Justiniano, y Darío Mendoza, además de estar igual investigados, el sargento Rubén Daria Alvarado, Tomas Eugenio Loza, Cabo Jimmy Condori Espejo y policía Marco Antonio León, por la comisión de supuestas faltas graves, al permitir el ingreso de bebidas alcohólicas.
Debido a estos hechos el abogado, Tamer Medina, tuvo conocimiento y publicó en su muro de Facebook una insinuación sobre la policía como organización criminal.
ORGANIZACIÓN CRIMINAL: POLICÍA NACIONAL?
Estoy conociendo un caso del que se publicó varias notas de prensa; policías del penal de morros blancos hacen lucrativos negocios con los internos, meten y cobran por trabajadoras sexuales, meten alcohol y drogas para vender a los reclusos y farrean con algunos internos.
No es un cuento, es una pequeña mina de oro que tiene protección de la jerarquía policial y parecería, de la misma dirección departamental de investigación interna (DIDIPI). La pequeña mina de oro es parte de una estructura grande de varias pequeñas minas de oro (trancas, EPIS, diprove, transito, etc. etc.) que enriquecen y/o genera bienestar ilícito a jerarquías policiacas y en menor grado a clases.
En el penal de Morros Blancos un interno se animó a hablar y puso la denuncia por escrito dirigida ante el coronel Tito Ivar Ortiz Amador, Director de la DIDIPI (Dirección Departamental de Investigación Interna). Posteriormente, volvió a poner denuncia escrita ante el fiscal policial capitán Willy Gamarra Landívar por tres hechos, cobro de entre 150 a 300 bs por el ingreso de trabajadoras sexuales en altas horas de la noche, ingreso y comercialización de bebidas alcohólicas y, que los policías se una de las guardias se pusieron a farrear con internos y trabajadoras sexuales durante casi dos días. A pesar de ello el fiscal policial abrió investigación disciplinaria por un solo hecho: ingreso de bebidas alcohólicas. Si esto no es protección a los denunciados, que es?
Mientras tanto, el denunciante fue sancionado con aislamiento por unos días por haber sido encontrado con un celular; Sin embargo cuando acudí a su llamado, mientras me hacían esperar, llegó un distribuidor de tarjetas de recarga de Tigo, toco el portón, salió y entro la cabeza de un policía, al minuto salió una interna a pagar y recibir un fajo de una altura de unos 5 centímetros de tarjetas de recarga de crédito para teléfonos celulares. Me pregunto, si no se permite el uso de celulares, por qué ingresan las tarjetas de recarga de crédito para celulares en presencia del control policial? Todo es inhumanamente absurdo en el penal de Morros Blancos.
Sería bueno saber si el comandante departamental de policía Sadid Ávila Vega puede (o quiere) hacer algo. O, si el Fiscal Departamental Wilson Tito Torrez considera que hay elementos como para disponer una investigación penal de oficio. O, si ésta información le interesa un poco al Ministro de Gobierno Carlos Eduardo Del Castillo Del Carpio quien tiene tuición (y quiere tener más) sobre la policía.
Mientras tanto el denunciante es amedrentado y teme que los denunciados manden a otro interno a “pasarlo por cuchillo”. Tengo los nombres de los denunciados pero no los público porque considero más importante llamar la atención de los que están llamados por ley a hacer cumplir la ley. Y no lo hacen. De ellos estoy poniendo el nombre completito.
Por si no fuera poco, a los días de estos sucesos se conoció mediante nuestro medio de comunicación que existen denuncias sobre apuestas de policías sobre peleas de personas privadas de libertad
Policías apuestan en peleas de personas privadas de libertad
La familia del interno Julián Suruguay, asesinado a puñaladas por un interno de nacionalidad brasilera el pasado domingo en la tarde en la cárcel de Morros Blancos, denunciaron que los policías habrían provocado esta riña, además aseguraron que estos permiten que peleen durante una hora, haciendo apuestas con dinero en efectivo.
La madre de Suruguay dijo que el asesinato de su hijo es grave, y que su hijo ya estaba sentenciado a morir, debido a que sabía varias irregularidades que existe en la cárcel, por lo que responsabilizaron de este asesinato a los policías y responsable de este penal.
“No me dijeron que lo mataron, solo decían que sufrió un accidente, fue una amiga que tengo que me conto que mi hijo estaba en quirófano (…) nosotros fuimos y ni siquiera sabían su nombre, ni edad, además decían que no tenía familia, si no íbamos o mi amiga no, nos llamaban lo hubieran botado como perro”, dijo su madre.
Este sujeto se encontraba por el delito de violación y homicidio, por lo cual se encontraba encerrado en el pabellón de máxima seguridad, por lo que esta mujer cuestiona porque no existe seguridad en el lugar.
“Hay mucha corrupción en el lugar (cárcel de morros blancos), todo es plata ahí, hay mucha corrupción es que lo que puedo decir es que cuando quiero entrar a ver a mi hijo abajo, no podía, si tenía plata claro ahí me dejaban entrar (…) como es que ingresa alcohol, droga, si controlan todo ahí adentro”, dijo la denunciante.
Los denunciantes afirmaron que los policías hacen pelea de reos con apuestan para que los internos se enfrenten entre sí, dejando abierto las celdas durante una hora.
Sobre este suceso y otros Tamer Medina indicó que existe encubrimiento por parte de la DIDIPI, lo publicó en sus redes sociales.
En el penal de morros blancos aproximadamente a las 4.30 de la tarde, mientras 6 policías de la guardia comían ceviche en la celda de “el chileno”,en la parte baja del penal, apuñalaron a Julián. Los cevicheros recién se dieron cuenta a eso de las 5.30 cuando llegó la ambulancia.
el apuñalamiento de Julián se da cuando la policía de guardia está involucrada en una escandalosa denuncia de negociados por el ingreso de alcohol, droga, trabajadoras sexuales y otros, donde más escandaloso aun, es el encubrimiento de la “investigación” de la DIDIPI y del comando departamental.
Ingreso del alcohol, trabajadoras sexuales, apuestas por peleas, Morros Blancos parece sin control o tal vez esta controlado por corruptos.