Gabriel Morales/El Andaluz
Hacer un acto voluntario, el donar sangre, no siempre concluye con una gratitud, sino con un ‘lo siento’, pues al momento de realizar el examen de compatibilidad, el donante se entera que posee algún impedimento para la transfusión sanguínea, en Tarija, la mayoría son diagnosticados con la enfermedad de Chagas.
Lamentablemente, hay poca cultura en Tarija para someterse a exámenes de sangre de manera anual, los portadores de la enfermedad de Chagas se enteran que tienen el parásito Trypanosoma Cruzi, cuando intentan ser donantes de sangre.
La directora de la Plataforma de Chagas en Tarija, Lourdes Ortiz Daza, indicó que están en constante coordinación con el Banco de Sangre, donde las personas que son positivas a la enfermedad son derivados a la plataforma para someterse a un segundo examen sanguíneo.
Se calcula que en el mundo hay entre 6 y 7 millones de personas infectadas por Trypanosoma Cruzi, el parásito causante de la enfermedad de Chagas.
La enfermedad de Chagas se encuentra sobre todo en zonas endémicas de 21 países de América Latina, donde se transmite a los seres humanos principalmente por las heces u orina de insectos triatomíneos conocidos como vinchucas, chinches o con muchos otros nombres, según la zona geográfica.
En Tarija, de acuerdo a datos de la Plataforma de Chagas, cada año diagnostican con la enfermedad a unas 1000 personas. Pero en un promedio entre 130 a 400 pacientes inician el tratamiento.
Anualmente, la plataforma atiende entre 1094 a 1664 consultas nuevas, en cuanto a las repetidas, el número está entre 2261 a 5411, de estas atenciones médicas dan positivo a la enfermedad unas 813 a 1096, de estas cifras solo 472 personas inician el tratamiento.
“Tenemos una alta demanda y producción, hacemos pruebas de laboratorio para todos los pacientes nuevos, pruebas de diagnóstico, para los pacientes que son positivos, que podrían incorporarse al tratamiento, les hacemos pruebas de hemograma, de química sanguínea para ver cuál es la funcionalidad hepática, además se les hace cardiogramas para saber si no tienen alguna afectación, también se indaga si podrían tener o no una complicación digestiva”, detalló la profesional.
Daza, explicó que la enfermedad puede tratarse con Benznidazol, el tratamiento dura 60 días, tiene indicaciones estrictas en cuanto a dieta, puesto que es un medicamento que produce reacciones adversas, en ese sentido, la plataforma hace una supervisión para que en caso que se den las reacciones adversas, pueda intervenir de manera inmediata.
“Es un tratamiento que está constantemente supervisado por personal especializado”, citó.
Añadió, que el medicamento Benznidazol evita las complicaciones graves de la enfermedad, manifestaciones cardiológicas y digestivas.
“Cuando un paciente ya tiene afectaciones cardiológicas ya no puede hacer el tratamiento, lo que debe hacer es tratar la afectación cardiológica, muchos refieren un marcapaso”.
La Organización Mundial de la Salud (OMS), indica que la enfermedad de Chagas puede tratarse con Benznidazol, y también con Nifurtimox, que matan al parásito.
Ambos medicamentos son eficaces casi al 100% para curar la enfermedad si se administran al comienzo de la infección en la etapa aguda, incluso en los casos de transmisión congénita. Sin embargo, su eficacia disminuye a medida que transcurre más tiempo desde el inicio de la infección.
El tratamiento con estos medicamentos también está indicado en caso de reactivación de la infección -por ejemplo, por inmunodepresión- y en los pacientes al principio de la fase crónica.
Debe ofrecerse tratamiento a los adultos infectados, especialmente a los que no presentan síntomas, dado que el tratamiento antiparasitario puede evitar o frenar la progresión de la enfermedad y prevenir la transmisión congénita en las embarazadas.
En esos casos, los posibles beneficios de la medicación para prevenir o retrasar el avance de la enfermedad de Chagas deben sopesarse contra la duración prolongada del tratamiento hasta dos meses, y las posibles reacciones adversas que se presentan hasta en un 40% de los pacientes tratados.
Los medicamentos Benznidazol y Nifurtimox, no deben administrarse a las embarazadas ni a las personas con insuficiencia renal o hepática.
Además, puede ser necesario administrar un tratamiento específico para las manifestaciones cardiacas o digestivas.