Anapo reporta pérdidas de $us 600 millones en las últimas dos campañas agrícolas

Natalia López/El Andaluz

En Bolivia, se está experimentando una tormenta de económica y producción debido a la combinación de sequía persistente, escasez de dólares y problemas en el abastecimiento de diésel. Estos factores han afectado severamente diversos sectores, siendo uno de los más perjudicados el de los oleaginosos, como lo señala la Asociación Nacional de Productores de Oleaginosas y Trigo (Anapo). En las últimas dos campañas agrícolas, los productores han enfrentado pérdidas económicas significativas, alcanzando los $us 600 millones.

Jaime Hernández, gerente de Anapo, ha indicado que estas pérdidas han dejado a los productores con serios problemas de liquidez, afectando su capacidad para financiar la siembra de la próxima campaña de verano 2024-2025. A pesar de la producción de más de 5 millones de toneladas de diversos granos y la generación de casi 2 mil millones de dólares en divisas a partir de exportaciones, los productores enfrentan una alta demanda de diésel y una creciente dificultad para adquirir agroquímicos debido al aumento del 30% en sus precios.

La falta de dólares ha exacerbado el problema, ya que los importadores de insumos han incrementado los costos de producción. Además, los productores están recibiendo pagos basados en un tipo de cambio oficial desfavorable en comparación con el valor internacional del mercado. Esta situación ha llevado a una reducción en la producción de granos, con pérdidas de al menos 800 mil toneladas de soya en la campaña de verano anterior y 1,5 millones de toneladas en la campaña de invierno actual.

En la campaña de invierno 2024, se ha observado una disminución en el área sembrada debido a la sequía, con solo 558 mil hectáreas cultivadas frente a las 850 mil habituales. Los cultivos de rotación en esta campaña incluyen sorgo, girasol, trigo, maíz y chía, con áreas sembradas de 320 mil, 122 mil, 77 mil, 29 mil y 9 mil hectáreas, respectivamente. En el norte integrado, la siembra de soya está en proceso y se prevé que la cosecha comience en noviembre.